“LA CAFEÍNA INTERFIERE EN LA DECODIFICACIÓN DEL ADN DIVINO EN EL SER HUMANO”
Eran dos palabras que van ligadas en esta canalización cafeina y ascensión. Después de recibir la canalización como siempre me puse en marcha para intentar conseguir la máxima información sobre el tema para apoyar lo recibido.
La cafeína es un alcaloide cuya fórmula es C8H10N4O2. Es por lo tanto una “base análoga” a la Adenina, y puede en determinadas condiciones actuar como un gen mutágeno al ser incorporado en el desarrollo de las cadenas de ADN, cambiándose por la Adenina.
La cafeína es un químico encontrado en plantas como el café, el té, el mate, la nuez de cola o el cacao. También está presente en determinadas cantidades en los refrescos llamados de “cola” —líquidos oscuros que se encuentran por toda la Tierra—.
La cafeína es usada para el tratamiento de migrañas e incrementar la potencia de los analgésicos como la aspirina. La droga incrementa la presión sanguínea, estimula el sistema nervioso central, aumenta actividad motora, disminuye la fatiga y aumenta el estado de alerta, provoca la formación de orina y estimula la acción del corazón y pulmones.
En consecuencia a la larga su consumo produce irritabilidad, nerviosismo y ansiedad. También existen informaciones que apuntan a una posible intervención en las embarazadas y por consiguiente en el feto, produciendo graves problemas cuando se pasan de las seis tazas diarias. Algunos médicos creen que las bebidas que contienen cafeína aumentan la probabilidad de formación de cáncer.
Los efectos que produce en el organismo son similares a los de la morfina, la nicotina y la cocaína, pues la cafeína, al igual que éstas sustancias, es un alcaloide. La respiración se acelera, por lo que los sistemas que controlan las reservas del cuerpo son excitados y se gastan recursos innecesariamente. Cuando se ingiere cafeína, el azúcar de la sangre sube y la persona se siente reanimada, con más energía.
Pero esa energía ha sido tomada de las reservas por el estímulo de la cafeína, pues ésta no contiene ninguna sustancia que dé fuerza. Por lo tanto, el azúcar bajará rápidamente y la persona se sentirá más cansada que antes, lo que la obligará a tomar otra taza con una dosis mayor de cafeína para volver a sentir el estímulo de fuerza y energía. Este sube y baja del azúcar en la sangre agrava la diabetes, hace que el corazón lata irregularmente, eleva al colesterol en la sangre trayendo la posibilidad de un ataque cardíaco e inicia los problemas con presión alta y baja.
El cacao, del cual se elabora el chocolate, contiene un 3% de cafeína, por lo cual quien consume chocolate está haciendo lo mismo que si tomara café.
Con el cacao no es sólo la cafeína el problema, sino también las grasas saturadas, los condimentos que contiene, sino también la teobromina. Esta sustancia es una metilxantina al igual que la cafeína, que pueden causar graves daños en cualquier órgano o tejido, desarrollando quistes y tumores fibrosos.
Santiago Rubio(Saya)
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