Si nos despojamos de las vestiduras del ego, (entendiendo el ego como esa descripción asimilada por nosotros mismos y a la cual rendimos culto a diario), surgimos como campos de energia libres y fluidos.
Para ello los guerreros hemos acechar nuestra personalidad cuidando nos malgastar nuestra energia en la importancia personal energia que nutre el ego y nos deja sin la energia necesaria para materializar los anhelos del corazon.
Mejor no creernos el personaje que reprensentamos y sentir a ese hombre de nieve hecho de petalos de luz que descienden del cielo y se materializa em carne humana como un campo de energia libre y fluido.
Un saludo a todos despues de un intenso fin de semana en Navarra desplegando el Arte del Acecho.
Foto en la venta de Pagozelai disfrutando de la nieve en comunion con mi maestra La Madre Tierra.
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Santiago Rubio (Saya)